La Vila Joiosa (Villajoyosa) en castellano. Antiguamente su nombre era Alonis, y hoy día familiarmente se le llama simplemente La Vila y algunos La Vila Vella. Es un municipio de la Comunidad Valenciana, España. Perteneciente a la provincia de Alicante y situado en la Costa Blanca, en la comarca de la Marina Baja, de la que es su capital. Cuenta con 33.607 habitantes (INE 2017).

La Vila Joiosa puede ser una ciudad de tópicos: la luz, la luna, la mar, la gastronomía, sus casetas de colores y su historia, Son claves para tratar de explicar lo que, en realidad, no se puede contar con palabras. Hace falta visitar y conocer esta hermosa ciudad para comprobar que tradiciones centenarias conviven junto a la modernidad. Que el mar, la tierra y la ciudad son compatibles. Una población con clara vocación marinera, no le ha impedido tener una importante producción agrícola gracias a sus dos ríos.

En el mar o en la huerta, de día y de noche, La Vila Joiosa es única. Ya que conserva su estructura urbana y en sus viviendas las formas y distribución típica de la época de la reconquista. Con un casco antiguo, murallas y la Iglesia fortaleza de la Asunción conforman un importante conjunto Histórico-Artístico de la Vila. El nombre compuesto Vila Joiosa es de origen romance, procedente de la voz  gozosa o alegre.

Muchas cosas, en su casco antiguo caminar y disfrutar de sus callejuelas y plazas que corresponde con la vieja ciudad de intramuros medieval. Fuera del casco antiguo vale la pena pasear por las calles Colón y Canalejas donde se conservan edificios de los siglos XIX y XX. Visitar la Iglesia fortaleza de la Asunción, un templo perteneciente al gótico (siglo XVI), caracterizado por la sencillez decorativa.

Con el tiempo se fueron añadiendo elementos propios de cada época, como la Capilla de Santa Marta, que se construyó en el siglo XVIII, con un exquisito toque barroco. La Iglesia conserva dos inscripciones romanas, una en el interior y otra en el exterior. Y no podemos dejar de visitar el Museo Arqueológico de la Vila, cuenta con unas colecciones de las más destacadas de la Comunidad Valenciana de la época ibérica y romana, así como islámica.

                                                     El pecio Bou Ferrer: un naufragio de la época de Nerón.   

                                                             Una imagen espectacular de: National Geographic

Además la Vila cuenta con unas preciosas playas; entre ellas destaca la de la playa del Centro, que discurre paralela a su paseo marítimo, cuenta con todos los servicios incluidos una pasarela para minusválidos. Es una playa de arenas de arena fina y en un entorno natural, aéreas de grava y palmeras en el entorno. Además existen otras calas de gran encanto como la de Xarco. Y para los más golosos tenemos el chocolate de La Vila Joiosa, El comercio marítimo con ultramar propició una industria típica: la fabricación de chocolate. La ciudad cuenta con tres fábricas con sus respectivos museos para conocer la historia del dulce a través de más de 125 años.

También frente a la costa del la Vila hay un barco romano el “Bou Ferrer” muy bien conservado gracias al fango que lo cubría y se calcula que hay una 5.000 ánforas y lingotes de plomo descubiertos en la bodega del Bou Ferrer, llevan impresa la leyenda IMP GER AUG, los investigadores están convencidos que se refiere al Emperador Nerón. También llevan la leyenda CCV, que indica el peso del lingote: 205 libras romanas, que equivalen a 64 kilos cada uno. Estos restos arqueológicos se pueden visitar con un permiso que se da con cuenta gotas y con el carnet de buceador.

Y una curiosidad,  los colores tan llamativos de las casas son por un motivo.  Cuentan con una policromía típica del mediterráneo. Y aprovechaban los restos de pintura que usaban para pintar los barcos para sus casas, así cuando venían de faenar, desde lejos ya sabían dónde estaban sus casas y sus mujeres dejaban algún tipo de señal para indicar si se encontraban en casa o no.