La ley de Tenencia de Animales en Valencia es necesaria, pero después hay que obligar a que se respeten y se cumplan, para eso existen las sanciones económicas o administrativas.
Las autoridades en València nunca han actuado de un modo congruente y práctico ante la proliferación de la suciedad y daños en el inmobiliario urbano causado por los perros y no ha tomado medidas serias. También son diseminadores potenciales de enfermedades en el ambiente de la ciudad por su orina y excrementos.